Déjame

Déjame romper en llanto,
el grito furioso que llevo dentro,

Ya se hizo de madrugada
no estuvo en mi cama,
los pajaros cantaron
se rieron de mi,
de este escueto final.

Déjame romper en llanto,
el grito furioso que tengo en la garganta,

Me dejó con un abrazo
y eso fue mas fuerte
que si se hubiese marchado
sin decirme nada.

Déjame romper en llanto,
el grito furioso que se escapa por mis ojos,

Y me dices que me calle
que busque más adentro
que no pierda la calma,
que me mire a los ojos,
que resista,
que ya no mire al horizonte,
que ya se ha ido...
que no volverá.

Pero entonces,

Déjame romper en llanto,
este grito hirviente que llevo dentro,
para vaciarme de una vez
de su presencia ausente
de las ganas
del querer
de esta angustia
de la vida

Para que con este solo gesto
el luto tome su sitio
y ella se vaya con el olvido.

(Quemando Penas)